A veces, me cansa eso de comprar helados, en formato de cassata, por el mismo hecho de tener que estar sacándolos, y a veces medios congelados, etc. Bueno, con mi pendex, decidimos variar en el postre y compramos dos Suspiros Limeños de Soprole. Los comimos anoche, y estaban increíbles. Muy buenos postres, eso sí, viene poco contenido, como que el envase es grande y apoteósico, pero lo abres, y viene poquita cantidad. Pero así y todo, estaban buenísimos. Una buena alternativa para tener un sabor rico y clásico en casa, sin revolver por horas.
Todos los días, algo diferente en la cocina... todos los días hablamos de comida... todos los días, un plato o una sugerencia distinta... Nos comprometemos a que los 365 días del año, habrá algo sabroso de que hablar...